Si el Derecho se puede definir como la disciplina que estudia las leyes y su aplicación o como el conjunto de normas, leyes y principios que ordenan la vida en sociedad, el abogado se ha configurado como un agente esencial en esta disciplina.
El abogado juega un papel fundamental en la resolución de conflictos, con su asesoramiento ayuda a prevenir y evitar incumplimientos futuros. Y cuando el conflicto ya existe, puede adoptar el papel de defensa de su cliente.
Ese agente fundamental en el mundo físico sin embargo tiene unas características totalmente diferentes en el ciberespacio, en internet.
En Internet no existe ningún organismo a día de hoy que habilite al abogado para el ejercicio de su actividad, tal y como existe en el mundo físico. Sin embargo, en los últimos años han comenzado a surgir “abogados virtuales” o ciberabogados.
Abogados que actúan profesionalmente dentro de la propia Red, ofreciendo servicios fundamentalmente virtuales, como por ejemplo, elaboración de formularios online, escritos digitales, contratos tipo o para prestar servicios de asistencia virtual. Ha surgido un nuevo profesional especializado en Derecho de las tecnologías de la información y comunicaciones que actúa dentro de estas propias redes de comunicación.
Pero incluso estos abogados tienen que adaptarse a la nueva realidad o era tecnológica para que podamos definirlos verdaderamente como ciberabogados.
La hoja de ruta de un ciberabogado, como ya he enunciado en otras ocasiones, debe ser la siguiente:
• Asesora a su cliente desde y para el ciberespacio
• Conoce los problemas de Internet
• Conoce las leyes territoriales donde se ubica, pero conoce mejor la normas que intentan ordenar el ciberespacio
• Desempeña dos roles, uno en su espacio físico-temporal donde asesora a ciudadanos, organizaciones y empresas en materias Tic y otro rol donde asesora a ciberciudadanos y ciberempresas en un nuevo entorno, con nuevos paradigmas, conflictos y normas.
• Cumple de forma voluntaria, normas básicas de deontología, aunque no exista organismo que se lo imponga.
• Ayuda a la resolución de conductas antisociales con el fin de intentar conseguir una actividad cívica y pacífica en la Red.
• Realiza tareas sin intervención humana.
• Automatiza tareas jurídicas que pueden ser realizadas por computación.
Álvaro Écija (@Alvaro_ecija)
Managing Partner at Ecix Group (@EcixGroup)
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